Contar con una planeación patrimonial consiste en tener en orden todos los bienes con los que uno cuenta y poder prevenir el impacto que pudieran tener ciertos eventos como una enfermedad, un accidente o la muerte. De igual forma, contar con una adecuada Planeación Patrimonial contribuye a que se prevengan futuros conflictos familiares al dejar en claro cómo se van a distribuir los bienes o de qué forma los mismos pueden ser aprovechados y en qué momento. Para ello existen diferentes herramientas jurídicas que son muy efectivas y que dan certidumbre legal para cumplir estos objetivos como por ejemplo el Fideicomiso.
Pero qué sucede en aquellos casos en los cuales la planeación patrimonial no depende de una sola persona, sino más bien de una familia que comparte la propiedad de un bien o un conjunto de bienes, esto implica que dos o más miembros de la familia tengan que llegar a acuerdos acerca de la distribución del patrimonio que poseen y de cómo puede ser aprovechado por las futuras generaciones.
Hablar sobre temas de planeación patrimonial dentro de una familia suele tocar fibras sensibles, ya que cada uno de sus miembros puede tener diferentes posturas respecto a cómo se debe a manejar el patrimonio por lo que es importante explorar cuales son los intereses y necesidades de cada uno de ellos para continuar con la armonía familiar a la que vez que se protege el patrimonio para ellos mismos y para sus descendientes.
Una opción totalmente viable para aquellas familias que presentan dificultades para ponerse de acuerdo respecto su planeación patrimonial es la Mediación.
¿Qué beneficios ofrece la Mediación en la Planeación Patrimonial de una Familia?
La Mediación es un medio por el cual un tercero imparcial denominado Mediador interviene en una controversia para que las mismas partes, a través del diálogo, encuentren una solución que sea satisfactoria para todos los involucrados. Y tomando en cuenta que el mediador es un profesional que tiene una formación especializada en temas referentes a la interacción y comunicación humana, resolución de conflictos y gestión adecuado de las emociones, las diferencias que surgen en una familia como consecuencia de temas relacionados a la planeación patrimonial pueden definitivamente ser resueltos a través de la Mediación. Además, ofrece ventajas que resultan atractivas para este tipo de controversias entre las que se encuentran:
Confidencialidad – El Mediador fomenta un ambiente en el cual los miembros de la familia se pueden escuchar y expresar, y todo lo que se trate dentro de las sesiones ahí se queda, la información no puede ser compartida con nadie más.
Ahorro de tiempo y dinero – Existen casos en los cuales las familias, al abordar temas patrimoniales, lamentablemente terminan peleadas e inclusive llevan estos problemas ante un juez. Sin embargo, en la mediación los miembros de la familia son los dueños del proceso y son ellos mismos los que deciden el número de sesiones que consideran pertinentes para resolver sus conflictos, esto es un proceso que puede durar días o semanas o como las partes lo consideren a diferencia de un juicio que puede tardar años lo cual implica pérdida de tiempo y un alto costo económico y emocional.
Cumplimiento de los acuerdos – Debido a que los acuerdos a los que se llega con la familia surgen de sus propios recursos y propuestas, es altamente probable que sus miembros se sientan más comprometidos con cumplirlos y si lo aterrizamos al tema de la planeación patrimonial que ejecuten las acciones para proteger sus bienes.
Es así como se concluye que es importante definir los instrumentos con los cuales se van a proteger los activos de una familia, pero si presentan dificultades previas para definir cómo lo van a hacer, una forma práctica para resolver estas dificultades es a través de la Mediación.
Juan Miguel Castro Alcocer.
Licenciado en Psicología y Derecho.
Mediador Privado Certificado.